Yo tan sereno que me estaba comportando... Oh cruel destino me la has jugado de nuevo. Me probaste que sigo siendo el mismo tonto confiando. Que no estoy preparado, que sólo me tengo a mi... Y yo sigo en este limbo, no sé qué será de mi. Tal vez un poco de café y una buena película de drama me ayuden, pero tu cruel broma me dejó trabado... helado... no sé qué más hacer...
De ahora en adelante seré una almeja...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario