viernes, agosto 8

Me huele a deseo...

Hueles a deseo noche de naranja, enredos mentales, con la irionía y sueño en la mente. Con el ideal de encuentros amigueros. Por otro lado un encuentro ocasional se dio y no creo que se vuelva a dar, no porque no me haya gustado, sino por su contexto inamoroso.

Repito la historia antes de destruirla, no entregar lo preciado de una sola vez. Un deseo obsesivo se aproxima por las caller desiertas, seca todos los hiervajos y plantas del jardín. Hasta que tuviste que abrir la boca. Todo en secreto y tu con miedo, con calentura y con acciones. Enamorar es dificil pero no quiero verte, por la situación inusual, un momento sensanatural y déjate llevar.

Cuídate y quiérete. Valórate y deja vivir. En otras palabras déjame en paz...

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