La gaviota partió en vuelo alto, la ligera brisa marina acaricia sus alas suavemente y la eleva en un viaje sin retorno. Tardes enteras de risas y amor la acompañarán. Ilusiones inconclusas, que más que ilusiones se convertirán en mi motivación cotidiana. La gaviota vuela alegre por el cielo, brinca de nube en nube recordando sus sueños.
Recuérdame querida gaviota, cuídame, enséñame y espérame, que la espera no será larga. Piensa que la marea sube y baja; en la espiral de las caracolas y en como las algas cambian de color. Maravillosos y cálidos rayos de sol cobijan tu sonrisa.
Te vas junto con el sol, las flores lloran tu partida pero siempre te recordaran. Volarás hasta el cielo nocturno, hasta la estrella más brillante y aguardarás por los viejos sabios, que te enseñarán el nuevo camino. Jamás te olvides que acá miramos al cielo buscándote y te encontraremos.
Recuérdame querida gaviota, cuídame, enséñame y espérame, que la espera no será larga. Piensa que la marea sube y baja; en la espiral de las caracolas y en como las algas cambian de color. Maravillosos y cálidos rayos de sol cobijan tu sonrisa.
Te vas junto con el sol, las flores lloran tu partida pero siempre te recordaran. Volarás hasta el cielo nocturno, hasta la estrella más brillante y aguardarás por los viejos sabios, que te enseñarán el nuevo camino. Jamás te olvides que acá miramos al cielo buscándote y te encontraremos.