miércoles, febrero 8

Sed de guerra del amor que el alma llena.


Me embarco en una nueva aventura, mi barco, un simple bajel se ve imponente en comparación a otras embarcaciones, pero al comparase con el océano de la vida se ve tan pequeño; así transcurren los días y las noches en busca de esa preciada tierra, esa que tiene los mas preciados tesoros, la rareza mas bella, las mas delicadas y dulces frutas. Llevo embarcado alrededor de tres meses, mis provisiones comienzan a escasear, mis esperanzas se ven cabizbajas y mi tripulación ha ido muriendo poco a poco.

Ya por el sexto mes, hacia el suroeste se alcanza a ver una mancha en la lejanía, al parecer es una isla, los tres hombres que quedan en mi tripulación deciden amotinarse… esa noche mientras dormía el aire frío empapaba mis pensamientos con la brisa marina que se colaba por la ventana, entonces, pisadas, golpes y mordazas.

Me despierto, a la mañana siguiente en un bote, golpeado por los sentimientos (tripulación), la que parecía ser una mancha en el océano ahora es una imponente isla, es mi única salida así que me dirijo hacia ella. Cuando por fin llego a la orilla agotado lo único que quiero es recuperar fuerzas, simplemente cierro los ojos…

Cuando me despierto, me doy cuenta que las ropas que visto no son las mismas y que me encuentro en una habitación hermosa llena de seda tan suave que al simple rose con mi piel se eriza con una delicada sensación de placer, mis heridas un poco más curadas agradecen la presencia de esa suave tela. Alzo la vista para analizar lo que me rodea es hermoso, árboles tan grandes, vegetación tan verde todo parece lleno de vida, pero era un espejismo de lo que en realidad me esperaba… comienzo a caminar anonadado por tal belleza natural hacia lo que parece una fuente, yo sediento bebo de ella cuando oigo una voz en mi cabeza que casi revienta mis oídos. Fue entonces cuando te vi, tus ojos los más hermosos que he visto, tu boca carnosa que me inspira calma y tu anatomía caribeña me deja sin palabras, pero tu rostro parece preocupado y a mí no me importa. Lo único que quiero es tenerte entre mis brazos para poder tomarte y no soltarte nunca. Corro hacia ti y te abrazo tu rostro aún mas preocupado que antes me dice que algo anda mal pero no me importa, cuando emitiste las primeras palabras, mi mente ya no fue mi mente, mi cuerpo ya no era mi cuerpo solo era un ser drogado con una sustancia que me tenía casi flotando, cuando pude comprender lo que decías mi cabeza casi estalla, había bebido de la fuente que producía el amor.

El dolor era insoportable, sentía que mi cabeza iba a estallar, tu lo único que dijiste es que me tenía que ir de la isla, por que lo que hice estaba prohibido, sí me había enamorado, es curioso que este prohibido, pero no me diste más explicaciones, así que lo que hice fue dejarte a la orilla de la playa, para enfrentar la mas dura batalla que me ha tocado lidiar, yo contra el amor, se que esto será benéfico por que de haberme quedado contigo hubiera muerto de amor, así que hoy comienza una nueva hazaña en donde sabré que contaré contigo siempre pero simplemente como amigo, ya que el amor está prohibido.

P.D. Después le voy a modificar mas cosas, estoy un poco cansado y solo es un panorama para que sepan que es lo que ando haciendo… sí tengo sed de guerra del amor que el alma llena…

1 comentario:

Antonio Leon dijo...

ni tanta... jeje, saludos!