Tumbado ante tu recuerdo me quede viendo el techo. Imaginando los diferentes senderos de tu piel me recuerdan mis propios senderos, hace bastante frio pero deseo tanto desenredar mi mente... así me quedo, inmovil ante mi deseo de autoconocimiento, recostado tu recuerdo llega de entre la bruma de mis recuerdos...
Y alli estabas, parado y sonriendo. La luz de la ventana jugueteaba con tu cara, la luna había salido a saludarte, y sólo te me quedas viendo... veo que mueves la boca pero no percibo ningún sonido... te digo que repitas lo que me habías dicho... sólo un eco distorcionado escucho... sólo me quedo viendote en la penumbra, con tu rostro empapado de luz de luna.
Te sientas en la cama, sigo observándote, abres la boca y mis oidos alcanzan a distinguir un tenue eco de "me marcho"... sólo me quedo viendote y veo como te vas... en mi cama me quedé recordando tu mirar... tu sonrisa... tu voz...
Sin darme cuenta me quedé dormido, despierto cuando el sol ya estaba muy arriba, me levanto de un golpe a buscarte por mi casa, no te encuentro... ante la pena de un mal sueño, dejo que el agua fria de la ducha lave mis lágrimas... y empezamos la rutina diaria... un pequeño baile, en mi desnudez, por mi casa con la música que más me gusta (para secarme)... humectar toda mi piel y vestirme.
Salgo a la calle armado con mi cámara y cuando estoy por subirme al micro la bolsa de mi pantalón comienza a cantar...
Cel... "Nuevos ojos, nueva piel, nueva las manos..."
Era mi celular con una llamada... y el tono de Ely Guerra...
/... Bueno, Es el número de Sergio?
Yo... Sí, él habla... quién habla?
/... Hablo de Correos de México, tenemos un paquete suyo en la oficina, intentamos entregarlo en la mañana y nadie contestó... Podría pasar a recogerlo?
Yo... Qué raro! yo estaba en casa esta mañana...
/... mmmm podria pasar a recogerlo antes de la 1?
Yo... esta bien...
Y colgué, en verdad se me hacía muy raro que no me hayan encontrado y más que alguien me enviara algo... cuando me doy cuenta el micro me ha dejado... espero al siguiente y una persona se agrega a la espera en la parada...
Ella, una mujer entrada en años, vestida toda negro, envuelta en lágrimas, me daba curiosidad hablarle pero a la vez pena, sólo la dejé llorando... llegó el micro y la dejé pasar antes para compensar un poco mi pena... el micro estaba vacío...
El chofer sólos se dedicó a cobrar el pasaje, ignorándola por completo, ella se sento de lado derecho hasta en frente y yo del izquierdo hasta el fondo. Me daba tanta curiosidad saber su historia que sólo le tomé una foto... cuando me di cuenta había otra persona que había subido al microbus... era un hombre muy delgado, parecía que se iba a quebrar, iba pegado al celular y riéndose a carcajadas... no paraba de hacerlo... se sentó detrás de aquella desdichada mujer...
Y allí estaban los dos, una llorando y el otro riéndose... tal parecía que cada uno en su agonía matinal se provocaba al vecino... entre más llanto, más risa y una nueva foto...
Una penúltima parada aguardaba, subíó un señor bastante mayor, apoyado con un bastón, tenía una bonita gorra y se miraba como el abuelo que todos quisimos tener... observó a los pasajeros y se sentó detrás del flacucho de las risas, que estaba detrás de la mujer hecha lágrimas... el señor del bastón sólo se quedó mudo, percibiendo aquel suceso... mi curiosidad me pidió otra foto...
Y allí anda por su ruta, cargado de sentimientos... Por fin hago la parada, pero mi curiosidad me decía que me quedara para saber el final de aquella obra teatral, inusual y perdida en la cotidianeidad. Me tenía que bajar, pues ya iba a ser la una... y un paquete me aguardaba...
Al ir por las calles, que extrañamente se miraban más solas que nunca, me sentí observado, pero al voltear la vista sólo una calle desierta me saludaba. Al llegar a la oficina de correos, el panorama cambió...
Sólo una oficina, con su característico olor a papel nuevo y limpiador barato...
Yo... Buenas tardes, me hablaron porque tienen un paquete para mí...
/... Cuál es su nombre?
Yo... Serge C
/... Ahh sí, aquí está...
Me hace llenar un formulario y me entrega una caja grande, forrada de papel café y amarrada con un listón verde... tenía mi dirección y mi nombre pero no tenía el de la persona que me lo habia enviado... tomo la caja con mis dos manos y salgo a la calle desierta...
Cargando llego al café de siempre, dejo la caja sobre una mesa, todos me preguntan que sí qué hay en la caja y les cuento la historia... Me tumbo en una silla, cansado de andar cargando, bebo de mi ya cotidiano café con leche y canela. Me doy cuenta que en una de las esquinas tiene un sellito con una catarina, bonito sello... minimal... le doy otro sorbo a mi café caliente, me quemo y mi atención se desvía d ela caja, voy al baño a verificar que mi lengua no tenga una quemadura de tercer grado... se mira normal... cuando vuelvo a la mesa Erika tiene un cuchillo en la mano, Ana y Mariné la observan ansiosas...
Yo... Qué hacen?
Ana... Nada...
Una sonrisa pícara se asoma sobre el rostro de mis amigas... agarro la caja y la pongo en el suelo, el rostro de las tres se llena de desilusión, la caja era mia para variar... sigo disfrutando de mi café y tu recuerdo me llega de golpe...
Ohh inmaculado ser empapado de deseo, deslumbra mis sueños con tu sonrisa y tus ojitos coquetos... envíname las ganas de arrancarte un beso y guardarlo en una caja... caja... LA CAJA...
Mi mente vuelve al café, pongo la caja sobre la mesa y cuando volteo la vista ya estoy rodeado de curiosidad, la de mis amigas (la mia estaba tranquila).
Le tomo una foto a la caja, por aquello de los recuerdos... corto el listón verde y arranco el papel, sin su follo la caja era completamente blanca... la abro y observo o que hay dentro... Una bolsa con naranjas, mandarinas y toronjas, una rosa y una carta... a decir verdad, lo que traia la caja parecía que pesaba más cuando caminaba por la calle...
Comparto los cítricos y tomo la rosa, la rozo con mi mejilla cual caricia de un amor perdido, me sonrojo y saco la carta...
La carta venía en sobre, uno decorado a mano, muy bonito, con mi nombre grabado en color plata, la abro y me pongo a leer... la carta decía...
Ohh amor, me duele decirte que parto y no volveré. No es que no te ame, no es que tus besos no me llenen el alma, parto porque el destino así lo quiere, no me busques, no me llames, no me recuerdes como un amor, recuérdame como un amigo... te dejo una rosa en símbolo de mi amor... y me duele decirte que el destino me trajo a otro amor, no te dejo por eso, te dejo porque lo nuestro no puede ser, pero te amo...Yo... Pinche destino cabrón...
Grito por dentro y me muerdo un labio... arrojo la rosa y mi corazón a la basura... magnificado por mi mente, deslumbrado en sueños, tiempo testigo de un corto momento de mi vida que significó mucho... cuando estoy a punto de soltar una lágrima... te veo venir a lo lejos y de repente...
Cel... "Nuevos ojos, nueva piel, nueva las manos..."
Oía mi celular sonar, pero no vibraba, lo saco de mi bolsa y no se movía, ni timbraba, cierro los ojos y cuando los vuelvo a abrir estoy recostado en mi cama, con los pies en la almohada y mi cabeza al filo del colchón... Son las siete de la mañana y el celular no deja de cantar...
Lo bueno que uno puede hacer crecer las cosas en sueños. Y que la vida no es como los sueños... O sí?P.D. Sin embargo, deseo volver a ver esos ojos...
P.D.2. Te amo Ely Guerra, pero esta vez te rayaste...